Las historias son alas que ayudan a remontar el vuelo cada día
Como cada 2 de abril, desde 1967, se celebra el Día Internacional del Libro Infantil. Esta efeméride es una iniciativa del IBBY que, coincidiendo con la fecha de nacimiento de Hans Christian Andersen, pretende inspirar el amor por lo libros y llamar la atención de la comunidad sobre los libros para niños. Para las librerías […]
Como cada 2 de abril, desde 1967, se celebra el Día Internacional del Libro Infantil. Esta efeméride es una iniciativa del IBBY que, coincidiendo con la fecha de nacimiento de Hans Christian Andersen, pretende inspirar el amor por lo libros y llamar la atención de la comunidad sobre los libros para niños.
Para las librerías Kirico es una de sus fechas más especiales.
Como explica Sonia Álvarez, de Cuentos Feliciana, “es un día muy importante para nosotros porque nos visibiliza y nos permite compartir con nuestros lectores el gusto por lo que hacemos y poner en valor libros maravillosos que pasan desapercibidos en el mundo adulto“.
Este 2022 la imagen oficial del día de la LIJ es de la ilustradora Julia Flett y el mensaje que la acompaña es del escritor canadiense Richard Van Camp. En él, leemos: “Dicen que los libros son amigos para toda la vida y estoy de acuerdo. La plenitud de tu universo solo crece cuando lees. Las historias son alas que nos ayudan a remontar el vuelo cada día, por lo tanto busca libros que le hablen a tu espíritu, a tu corazón, a tu mente”
Para sumarnos a esta celebración, este año hemos querido recopilar una serie de libros que simbolicen el disfrute lector. La felicidad de descubrir y compartir una historia, también para los lectores un poco más mayores. Estas son.
“El lobo y la mosca”,Antje Damm (Takatuka)
Es un divertido relato y, a la vez, un juego de observación y adivinanza para los más pequeños. El lobo tiene mucha hambre y se irá tragando uno a uno todos los juguetes… solo hay una mosca que se le resiste.
“Zorrito”, Edwrard van de Vendel (Pípala)
Une su preciosa ilustración a una cuidada edición. Narra las peripecias de Zorrito que, fruto de su curiosidad y poca prudencia, sufre un accidente. Mientras espera su rescate, comienza a soñar con las cosas que ha vivido y las historias que ha escuchado. Su autor es Edwrard van de Vendel y está publicado por Pípala.
“¡No soy un monstruo!”, Shinsuke Yoshitake (Libros del Zorro Rojo)
El autor japonés recurre a su habitual estilo, lleno de ingenio, para abordar un tema complejo como son las emociones negativas del tipo frustración o mal humor. Mantiene el trazo limpio y el aire caricaturesco para imprimir humor y cambiar el punto de vista sobre este estado.
“Los ladrones buenos”, Katherine Rundell (Salamandra)
Es una historia de aventuras de corte clásico que se centra en la amistad del grupo, la valentía y el espíritu justiciero. Son ladrones buenos que no roban, sino que recuperan lo que les quitaron, dejando perlas de humor y cierta crítica social.
“El espíritu del bosque”, Axelle Lenoir (Ediciones La Cúpula)
Es un cómic de ambiente vacacional que esconde sentimientos adolescentes y misterios sobrenaturales. Élodie es obligada por su madre a aceptar un trabajo como monitora en un campamento lleno de niñas listillas y algo impertinentes y en el que nada acaba como empezó.
“Meddling Kids”, Edgar Cantero (Insólita Editorial)
Es una novela de misterio con guiños a H. P. Lovecraft, que utiliza los arquetipos de las historias de detectives adolescentes para hacer un homenaje a los relatos de terror, pandillas y misterios interdimensionales.
“Hombre Luna”, Tomi Ungerer (Libros del Zorro Rojo)
Como es común en la obra del autor francés la crítica social está presente en este título. El Hombre Luna es un personaje inocente y lleno de bondad que decide visitar la Tierra en busca de amistad y diversión, sin embargo, se encontrará con una sociedad hostil que rechaza lo desconocido y con miedo a cambiar el orden imperante. Sí encontrará la ayuda de un científico olvidado por esta sociedad.
“El pequeño cuidador de insectos”, Nastasia Rugani (Nórdica Infantil)
Un pequeño libro para niños que ya leen solos, que nos habla del cuidado de la naturaleza, la democracia, de enfrentarnos a nuestros miedos y de romper con los roles de género. Nos cuenta la historia de dos hermanos cuyo padre ha sido Cuidador de Insectos hasta ese momento, oficio que deberá heredar su hijo, pero los sucesos llevarán a Noc y a Lulú hacia otro destino.
“Operística”, Kyo Maclear y Byron Eggenschwiler (Andana)
Se trata de una novela gráfica atrapante, tanto por su estética como por el argumento. Trata a la perfección el drama del instituto, la necesidad de aceptación, el primer amor y la amistad. Las ilustraciones son magníficas y las referencias musicales todo un acierto para enganchar al público juvenil.
“¡Silencio!”, Celine Claire y Magalí Le Huche (Pípala)
Una historia sencilla y entrañable que pone de manifiesto que las personas necesitamos vivir en sociedad, por muy maniáticos de la tranquilidad que seamos. Porque el ruido, la algarabía y la música significan una cosa: VIDA. Celine Claire nos lo cuenta con mucho sentido del humor en un álbum con unas ilustraciones preciosísimas de Magalí Le Huche. Además es divertidísimo para contar en voz alta. ¡Probadlo!
“El último oso”, Hannah Gold (Duomo Ediciones)
Para el día del libro infantil proponemos “El último oso”, de Hannah Gold, ilustrado por Levi Pinfold y editado por Duomo: si la infancia es el momento de lo bello, lo bueno y lo verdadero, esta historia plena de aventura y emoción, acompaña con esas tres importantes cualidades el recorrido vital de su protagonista y el asombroso encuentro con un oso polar.
“Escarabajo en compañía”, Pep Bruno y Rocío Martínez (Ediciones Ekaré).
Es un libro maravillosamente escrito por Pep Bruno, que homenajea a Arnold Lobel claramente con la elección de sus personajes tan queribles y especiales. Las ilustraciones de Rocío Martínez son luminosas, divertidas y completan la atmósfera creada por Pep Bruno. Desde luego, son historias para disfrutar, leer en compañía o soledad, reir y emocionarse.
LIBROS IMAGEN -MARTÍN FIERRO (Elda, Alicante)
“¡Aquí si hay dragones!”, Susannah Lloyd (Ediciones SM)
Una historia divertidísima en la que nada es lo que parece, donde nuestro protagonista, que nos recuerda a Don Quijote, anda perdido buscando dragones sin darse cuenta de nada de lo que ocurre a su alrededor. Con un caballo más listo que el hambre y una princesa más valiente que cualquier guerrero, esta historia hará que te tronches de la risa.
“Ñac-Ñac, el monstruo comelibros”, Emma Yarlett (Cubilete)
Una de las fortalezas de este álbum ilustrado es que hilvana la historia partiendo de un recorrido por todos los cuentos tradicionales y sus principales personajes. Crear una aventura con fragmentos de otras es una de las técnicas de creatividad a las que Rodari o Roal Dhal han recurrido. Eso convierte este álbum en una aventura divertida, alocada, trepidante y que nos dejará con ganas de saber de los cuentos tradicionales más en profundidad.
“Nunca jamás”, Melissa de la Cruz (Anaya Infantil y Juvenil)
Nos parece, como libreros, que puede resultar apasionante y emocionante su lectura porque nos ofrece una versión (y una visión) absolutamente nueva y desconcertante partiendo de la revisión de un clásico, como es en este caso Peter Pan. Este tipo de libros nos alientan a leer el original para contrastar y comparar y son como “un interruptor” de la creatividad al romper la historia que sirve de base y darle un giro nuevo.