¡Más música, maestro por favor! La que sonaba ya hace rato que cesó. Háganos bailar, maestro, que estamos entumecidos. Háganos emocionar, que ya nos estábamos volviendo de cartón. Háganos escuchar, maestro, que de tanto oír ya nos estábamos quedando sordos. ¡Suelte a todos los instrumentos! ¡Suene todas las melodías! ¡Música! ¡Más música! ¡Por favor!
Hay en estos poemas una sensibilidad tan cercana al mundo de la infancia, a la ternura y a la naturaleza contemplada desde la óptica infantil que sorprende. Sobre todo el eco de la fiesta, de los cantos, del descubrimiento de los compañeros de juegos como un universo al que se pertenece y que los mayores no tienen acceso. Estos poemas resultan hondos porque van a la música verdadera, nada es banal, todos parecen hechos para festejar la vida y la infancia como estado milagroso de felicidad.
La poesía y los jóvenes son una pareja indisoluble. El primer amor, los primeros deseos, los juegos y las dudas son los temas frecuentes en la poesía escrita por adolescentes. Pero faltan referentes cercanos para ellos, voces jóvenes con las mismas inquietudes, que usando las mismas palabras sean capaces de crear nuevos discursos cercanos y atractivos para el público adolescente. Así surge «Otros Espacios», una colección de poesía para jóvenes y en concreto el primero de sus títulos: Efectos secundarios, una antología donde quince escritores nos muestran con sus poemas una forma diferente de mirar lo cercano. Quince voces frescas, jóvenes, que renuevan el discurso poético con atrevidas propuestas. Quince poetas entre los que se encuentran algunos de los ganadores de los premios más prestigiosos de poesía, así como voces desconocidas, todavía inéditas con muchas cosas que aportar al panorama. En fin, una antología poética necesaria, un nuevo espacio que de seguro tendrá efectos secundarios.
Juan Carlos Martín, ganó el Premio Lazarillo, por este libro, Poemamundi. Se divide en tres partes: «El mundo por delante» trata de espacios alejados del mundo occidental donde se conservan valores que aquí ya no existen o están en vías de extinción como la convivencia, paz o solidaridad. «Alrededor de otros mundos» es un homenaje a diferentes autores de literatura infantil porque ellos, a través de la palabra, han sabido crear un mundo mejor. El último, «El mundo en mis manos», habla de lo cotidiano, de lo que nos rodea y forma el mundo particular de cada individuo. En palabras del autor: «Creo que escribir poesía es una forma de abrir ventanas a una altura idónea para la mirada de los niños, de ayudarles a buscar por sí mismos el verdadero sentido de las cosas».
Libro de poemas dirigido a un público infantil, que presenta motivos extraídos de la naturaleza: el mar, la luna, las caracolas, los peces, la nieve. Tratamiento poético fiel a la tradición rítmica de la poesía en lengua castellana destinada a lectores infantiles. Acompañado por las sugerentes ilustraciones a color de Paula Alenda.
Los habitantes del mar guardan muchos secretos. Para descubrirlos, solo se necesitan unas gafas submarinas o tener alerta todos los sentidos desde la playa o frente a la ventana: Son momentos para sentir la poesía en una adivinanza, en un guiso de la abuela, en los juegos de arena, junto a las gaviotas o la que inspira el caballito de mar, el cangrejo, la medusa… la barca del pescador o el barco de vela.